Sueño del 6 de Julio de 1990

*Era una película que se estaba filmando, y yo ya la había visto o se me hacía parecida.

*Estábamos en una iglesia o almacén, el caso es que estábamos en banca y de repente nos dijo el padre u otra persona que pasaríamos de uno en uno a disertar sobre un tema de política, economía, sobre el país. Pasaron varios y yo deseaba hacerlo. En eso le tocó el turno a Arreola. Era era muy bromista. Como unos niños estaban jugando y no le estaban poniendo atención, éste se detuvo y corrió atrás de los niños.

El concurso se detuvo, porque de repente fue de luchas, y una muchacha un poco más baja de estatura, se me puso enfrente. Entonces que me le voy encima. Y gané. Su mamá quedó algo triste

Estábamos en una gira, y al salir del hotel, pensé qué horas serían, un señor dijo que eran las 8, y me alegré porque podía vestirme y arreglarme bien para salir. Chucho estaba también. Vi las estrellas y la noche muy hermosa; parece que estábamos en Europa.

*Yo llevaba muchos paquetes, y me encontraba en el hotel, donde había muchos jugadores. Entré al elevador, y éste no se cerró, porque lo detenía un muchacho alto, que estaba bromeando con un grupo de amigos. Total, entró al elevador muy alegre y yo con mis cajas; él empezó a cantar y a coquetearme. Parecía que estaba escuchando una canción moderna, estaba muy alegre. Me le quedé viendo, que hasta me pasé de piso; le dije que si por favor aplanaba el botón 7 o 5, el aplanó el botón y se me acercó bailando, me tomó de los hombros y empezó a cantarme y acercarme demasiado su rostro. Estudié su cara y de repente me pareció muy atractivo, era mucho más alto que yo ( o así lo parecía) delgado pero fuerte, moreno, creo que tenía un poco de bigote, pero una boca que reía muy sexy. Pero era super coqueto, no dejó de reírse así, hasta que me besó lentamente varias veces. Yo me quedé sorprendida por tal confianza tomada que se me cayeron las cajas. Llegamos hasta arriba, luego a planta baja. Y él salió como si nada, aunque algo pensativo. Yo no. Fue así y bajé a decirle algo, aunque sería muy tonto, contarle algo que tal vez le aumentara el ego, así que no lo hice y lo miré alejarse por un camino de tierra amarilla.